Este tío se lo pasa de lo más bien cada vez que lleva a una puta a su casa y no precisamente porque se pase todo el tiempo follando con ella sino por lo divertido que le resulta jugar con ella sabiendo que al final van a acabar follando juntos. A la negrita que contrató este pasado fin de semana no sólo se la llevó de compras y de cena, sino que jugó con ella a juegos hasta que acabaron echando un polvo embadurnados en aceite.