—“Por el culo no te va a doler prima”—


Acostado en la cama, ella le pone un pie entre sus piernas, sonríe y lo incita a que él haga lo mismo con su mano. Lo hace y mientras ella lo toca por todos lados con muchas ganas, termina por agarra su polla. La idea era hacer lo mismo de siempre: una mamada de polla y luego que la tuviera dura, metérsela dentro del coño. Lo que sí paso, solo que el guion cambio rápidamente cuando su primo le dice: —“Por el culo no te va a doler prima, deja que te la meta suavemente”—. La ingenua, accede y desde ese momento, su ojete anal quedo bien abierto de la follada que le dio.