Su amiguita asiática acepta dinero por su coño peludo


Acaba de llegar al país y lo único que necesita es socializar y empezar a adaptarse a una nueva cultura y una nueva forma de hacer las cosas. Puede tomar agua potable y para ella, luego de probar su sabor, siente que ha valido el viaje tan largo. Entonces es obvio que luego que su amigo le ofrece dinero por su coño, ella aceptara sin dudarlo. El tío está flipando luego de ver que puede meter la polla dentro de la raja peluda de esa chica que esta tan buena y no tiene que pagar más de lo que habría pagado por una gaseosa, eso sí es un milagro del capitalismo.