Hermano solo acuéstate y yo me encargo de tu polla


Ya un poco más calmado, entiende que el único problema que no tiene solución es la muerte. Eso, gracias a que su hermana es muy compresiva y siempre trata de calmarlo. Ella insiste siempre que no importa lo que le pase, sabe que puede contar ella. Sobre todo cuando él más deprimido esta y ella le dice: —“Hermano solo acuéstate y yo me encargo de tu polla”—, mientras empieza a hacerle una mamada. Él muy tranquilo empieza a disfrutar y luego que la tiene bien dura, se pone a follar su coño para poder olvidarse de todas esas cosas que le hacían poner triste.